Intergeneracionalidad, un sinfín de beneficios para la población mayor

El término intergeneracionalidad hace referencia a la relación entre distintas generaciones. Esta conexión permite el correcto funcionamiento de la sociedad, y trae consigo grandes beneficios para todos los grupos etarios, especialmente para la población mayor de 60 años.

En efecto, la convivencia entre diferentes generaciones supone para las personas mayores la posibilidad de continuar desarrollando sus habilidades, transmitir su conocimiento y tener un envejecimiento activo, lo cual según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “significa un aumento en las oportunidades de participación de la población mayor en todos los espacios de la vida social y comunitaria”.

De acuerdo con lo anterior, esta práctica de cohesión social también impacta positivamente en la salud de los mayores, pues hace que su mente funcione mejor y potencia sus capacidades de valerse por sí mismos. Por ejemplo, según el Instituto de Mayores y Servicios Sociales de España, “las investigaciones han demostrado que las personas mayores que realizan con regularidad voluntariado con niños queman un 20% más de calorías a la semana, tienen menos caídas y dependen menos de bastones para desplazarse”

De igual forma, la intergeneracionalidad promueve los derechos de esta población, enfocándose en aspectos como: el fortalecimiento de la participación, al mantener integradas a estas personas en un entorno social; la educación, debido a que el relacionamiento entre generaciones produce un intercambio de conocimiento, cultura y habilidades; y la no discriminación, pues se borran los estereotipos y prejuicios que surgen en función de la edad, lo que se conoce como “edadismo”.

Es innegable que las personas mayores cada vez son más reconocidas por su contribución al desarrollo. Por esta razón, también en entornos laborales se pueden ver beneficiadas. En estos ambientes, los empleados de mayor edad, quienes son más experimentados, transmiten su conocimiento a los más jóvenes, y los juniors, por su parte, refuerzan las habilidades que suelen ser más difíciles para los seniors, como los temas relacionados con la tecnología.

Por último, es fundamental pensar en las generaciones desde una perspectiva relacional, en la cual se promuevan acciones, actividades, políticas y programas intergeneracionales, con el objetivo de impulsar los beneficios que se obtienen al reunir personas que se encuentran en diferentes momentos de la vida.

Alejandra Castellanos García

Pasante en 101ideas

Estudiante de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad de La Sabana, con énfasis en Periodismo Económico y Comunicación Organizacional.


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